Ayer 18/11/21 fuí a recoger unos medicamentos de mi tío y curiosamente al frente vive mi mamita Victoria a quien quiero mucho 💕 y extraño demasiado.
Toda esta bendita pandemia no ha hecho más que alejarnos de las personas que más amamos y sinceramente en primer lugar está ella.
Casi casi es de la edad de mi mamá aunque ella es un poco mayor por 2 años nada más.
La conocí prácticamente de casualidad y desde entonces no me había separado de ella hasta que llegó la pandemia y a pesar de que no nos veíamos físicamente oía su voz através del hilo telefónico, su voz dulce y tierna me hacían sentir de alguna manera la presencia de mi mamá y cuando me di cuenta añoraba mucho sus abrazos y el toque de sus manos entre mis dedos intentando recordar los de mi madre.
En la vida existen personas que llegan a tener ese punto parecido o sustitutorio y a mí me llenaba mucho el alma poder acudir a ella cuando me necesitase.
Por eso y a pesar de que había ido a la misma farmacia a recoger los medicamentos de mi tío en 2 oportunidades, esta vez ya no pude resistir la tentación de ir a visitarla.
Su hija a quien cariñosamente la llamo Eli me abrazó y yo accedí a su abrazo a pesar que ella ya ha tenido el coronavirus, pero bueno, eso fué más o menos medio año atrás.
Mamita Victoria con el cabello hasta el hombro solo sonrió,me abrazó y luego me dijo:
-¡Tu eres Patty!
-Si, sino que me he cortado el cabello y está teñido en color rojo oscuro.
Yo con mi mascarilla me río y me da un no se qué de que ella no pueda ver mi expresión.
Aunque la visita fué breve disfruté mucho de la conversación con la promesa de que incluso me inviten un rico lonchecito y quién sabe pronto también un almuerzito solo con mi mamita por aquí cerca nomás.
Al menos estaremos juntas unos momentos, prestadita nomás viendo cómo me mira tiernamente sabiendo que no tengo la compañía maternal añorada pero que mientras tanto la suple mi querida mamita Victoria.
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