Este día me he sentido fatal después de la noticia que llegó a mi WhatsApp y es que todo indica que nuevamente reanudarán la predicación pública.
¿Exactamente a qué se debe el apuro?
Obviamente tener más adeptos pues ya se perdieron bastantes durante el Covid19 y al mismo tiempo los que abrieron los ojos a la realidad de esta secta de diablo.
Lo que más me preocupa son algunas de mis amigas que dentro de su alegría seguramente ya están pensando en salir nuevamente a las calles, en realidad tengo temor de que puedan ser víctimas de personas agresivas quienes no tendrán ningún reparo en decirles el gran error que están cometiendo así sin más ni más.
Yo no conté cuando me enteré de la falsedad de esta religión o mejor dicho como me afectó... la verdad fué horrible, mi cuerpo sintió el impacto y sentí náuseas, no pude dormir pensando en cómo había perdido mi tiempo y lo peor y más doloroso eran mis amigas que aún no saben la verdad o por lo menos es lo que se nota en sus mensajes.
¡Díos mío! Toda esta situación me tiene asqueada y hoy me entero que han nombrado anciano y siervo ministerial a 2 personas que aprecio muchísimo.
Definitivamente este solo ha sido un día con su noche de malas noticias y yo me siento como la mujer maravilla sin poderes, totalmente impotente de no poder hacer nada mientras tanto y solo me queda esperar todavía mi momento.
Espero de verdad que hasta ese día triunfal Dios me de vida y así poder cumplir con aquello que he prometido, sobretodo por el bien de quienes para mí no merecen estar en esta secta asesina y demoníaca.
La única mano que puede poner fin a esta secta es solo Dios, el resto solo seremos una ayuda extra nada más y punto, pero PUNTO FINAL.
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