12:30 pm llegó el gasfitero para arreglar tanto el grifo del baño como el de la cocina.
Supuse de manera errónea que se tomaría un par de horas en arreglar el par de grifos pero no, resulta que se dió la santa paciencia de terminar a las 4 de la tarde.
Aún no habíamos almorzado y el bendito Sr. le había fallado a mi tía ya en 2 ocasiones por lo que aparentemente parecía que lo haría otra vez, pero no, si llegó y se demoró todo lo que pudo.
Juro que el hambre me mataba, me comí 1 granadilla, mastiqué varios chicles y tomé varios vasos de refresco implorando de manera silenciosa que el bendito en cuestión acabara lo más pronto posible con la chamba.
Yo sé que la paciencia es una virtud y de eso no hay duda pero cuando el estómago está prácticamente vacío no hay forma de que aquella misma virtud haga mella en el hambre.
¡Y se fué! Bendita la hora que lo hizo porque antes de eso ya me había comido el pan de mi lonche.
No exagero si digo que mi escabeche desapareció en 5 minutos del plato y solo quedó la coronta del choclo porque el pescado no tenía espinas o al menos eso creí.
Ya aliviada después de devorar mi almuerzo me preparé un rico Té Jazmín el cual según la información del Internet aporta algunos beneficios bastante interesantes como por ejm:
*Es relajante y alivia el stress- y en realidad a estas alturas no lo dudo en absoluto pues me siento sumamente tranquila después de beber de esta rica infusión.
*Reduce los síntomas del dolor (cabeza y muscular)
*Ayuda en bajar la frecuencia cardíaca y produce un efecto sedante en los sentidos.
*Es alto en antioxidantes y combate los radicales libres que aceleran el proceso de envejecimiento a la vez que disminuye el riesgo de contraer cáncer.
*Baja la acumulación de colesterol y grasas no saludables, también reduce el riesgo de enfermedades del corazón y accidentes cerebrovasculares.
*Tiene propiedades antivirales y antibacteriales previniendo enfermedades respiratorias.
*Contribuye en la perdida de peso.
*Promueve el desarrollo de bacterias que ayudan al cuerpo en el tema digestivo.
*Regula la circulación de la sangre, previene los coágulos, placas arteriales, daño cerebral, hipertensión arterial, trombosis y más.
* Reduce las probabilidades de desarrollar diabetes pues regula los niveles de azúcar e insulina en la sangre.
Me parecen demasiados beneficios en una simple bolsita filtrante, aunque claro está que se refiere sin duda a la flor de jazmín.
Relatando todo esto se me vino a la memoria las veces que íbamos a un chifa en la Urb. Elio cuando vivía por allá en los años 80.
¿Cual es mi plato favorito?
Sin duda el arroz blanco con pollo enrollado en salsa de ostión y en realidad prácticamente es el único, lo demás no me apatece salvo la sopita wantán, los wantanes fritos y el tallarín saltado.
Recuerdo las veces que íbamos en familia y mi papá siempre pedía sus ricos y humeantes tallarines saltados con su tortilla encima.
Al finalizar de degustar los ricos platillos llegaban como por arte de magia las blancas tazas llenas de agua caliente y en cada una de ellas a un lado un filtrante de té jazmín.
El aroma es sin duda inconfundible y su sabor mmm... relaja los sentidos, si, en realidad esta rica infusión oriental tiene lo suyo, tiene magia, tiene algo especial y no por gusto lleva un sello oriental.
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