Se acaba, se acaba, se acaba este 2021 y es que parece realmente increíble como han pasado super rápido 1 año y 9 meses y medio desde que nos escondimos en nuestros hogares sumergidos en un mar de peste e incertidumbre de no saber si esta pandemia nos llegaría a tocar y por ende sentir ese temor de ver a nuestro familiar allí, indefenso frente a un virus que nos presentó a la muerte en vivo y en directo.
Cualquier película de Hollywood quedó chica frente a este terrible monstruo invisible que literalmente arrebató a muchos de sus familias.
Aunque agradezco a Dios no haber tenido aún el virus igual creo que lo llegaré a tener más adelante pero ya bajo otra perspectiva y lógicamente estoy muy feliz de al fin estar trabajando de manera presencial y también con mi propio negocio el cual me da muchas satisfacciones personales y sumado a eso el anhelo de continuar aunque claro está de una manera más lenta pero con la seguridad y alegría de hacer lo que me gusta.
Aunque trabajando de manera presencial no me va nada mal, he optado por ponerme metas y siento que mi vida tiene un bonito rumbo.
Una de las cosas que me gusta son las nuevas personas que estoy conociendo pues ahora mis jefes son nuevos y tengo una nueva compañera de trabajo además de algunas personas con las que me estoy llevando bien.
Disfruto mucho el conocer gente nueva y que me conozcan también pues como es lógico pensar me aburro con las mismas personas siempre, ya que no hay novedad.
Añadido a eso también puedo ver nuevas situaciones que me motiven a seguir escribiendo historias ya que estas necesariamente tienen que ser de la vida real y con las que yo interactúe para así sentir y palpar de primera mano una anécdota o una experiencia chévere.
Por lo pronto el 1° de Enero como siempre será un día muy especial pues al ser el primer día del año 2022 quiero hacer algo diferente y veré con que salgo en el momento aunque ya lo pensé.
Ya quiero que llegue ese día y también ya sé que ropa me pondré ¡uffff! Estoy emocionada.
El 2022 para mí sinceramente trae promesas muy bonitas, incluído looks nuevos y también nuevos modelos de bolsos y además una pequeña sorpresa que sin duda me llenará de muchas satisfacciones.
No cabe duda, estoy con la emoción a mil y ya quiero que sea el 2022.
Por lo pronto, dejé el celibato de no tomar gaseosa y de ves en cuando le estoy tomando nuevamente cariño, ¡ojo! ¡Ya no es una obsesión!
Mi vida está dando un giro emocionante y cargado de adrenalina y eso sin duda me encanta, al menos puedo seguir con mi historia y pretendo de algún modo lograr mi objetivo final y estoy segura que así será.
¡Gracias Dios mío por darme tantas habilidades, incluído lo de los sueños, que en mi caso son predecibles!
Commentaires