Ya he contado que soñé con un perrito pero en esta oportunidad fué de la raza Fox terrier de pelo duro y justo de este color de la foto.
No sé porque sueño continuamente con perritos que por lo general son pequeños.
Yo me encontraba al lado de alguien pero no sé si sería hombre o mujer pues mi atención se enfocó en el can y me acerqué para acariciarlo y se dejó tocar, el perrito en cuestión se entusiasmó y se puso muy cariñoso y efusivo.
Debo añadir que la persona cerca a mi lo tenía cargado y aún a pesar de saber de la emoción del perrito no lo soltó pero si dejó que le haga caricias.
En la vida real nunca he tenido un perro de esta raza y me parece un poco curioso eso de soñar con él, pero si tengo un perrito en mente para adoptar y definitivamente no es ni de esta raza ni tampoco salchicha, es más, ni he soñado con el can que quiero, pero lo que si puedo añadir es que por lo general he soñado con perros machos y el que yo quiero es hembra.
Viendo esto del sueño recordé una vez hace tiempo, en la que saliendo de un ascensor un perro grande, blanco y peludo tipo siberiano entraba por la puerta de lunas de aquel edificio, ambos hicimos contacto visual y fué un flechazo instantáneo porque lo miré con mucho agrado sin titubear me empecé a acercar para ver si podía acariciarlo y el perrito hizo el ademán de correr hacia mi a pesar de estar con la correa que tenía sujeta su dueño y al sentir el forcejeo lo soltó y prácticamente en cuestión de segundos el perrito se dejaba acariciar y se mostró muy cariñoso como si nos conociéramos de toda la vida.
Debo confesar que fué muy impresionante ver como un animalito puede sentir esa vibra de conexión, la misma conexión con la que las personas también se juntan y encuentran ese toque especial con otras y de dónde se forjan y mantienen amistades.
Mi mamá siempre decía: Al animalito sólo le falta hablar y esto incluye a todos los animales.
Yo espero que este sueño me esté dando un buen indicio de algo y no dudo que así será.
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