En estos momentos mi mente es un remolino de historias, si, con 3 historias paralelas de por medio me siento sumamente feliz pues siento que mi vida está dando un giro completo.
Quizás alguien diga por ahí que es imposible escribir historias paralelas pero yo puedo afirmar de mi propia experiencia que si se puede.
Puedo afirmar que escribir es como picar varios platillos deliciosos, mmmm... a ver, si, me imagino de pronto en un buffet y yo con mi plato vacío me dispongo a acercarme a una mesa larga y veo unas ricas papas sancochadas, más allá visualizo la crema huancaína pero más cerca está la crema de la ocopa, mmmm...¿cual elegiré? Creo que una en una papita y otra en la otra papa.
Entonces, ¿Que tengo aquí?
Pues 2 entradas y esto recién empieza porque ya le eché un ojo a los ricos tallarines verdes, que separaré más adelante por supuesto, pero los tallarines rojos con carne también están que me dicen: ¡Cómeme!
Si, escribir es así, divertido, eufórico y delicioso pues aunque parezca mentira nutre los sentidos, la imaginación y el intelecto, también llena de emoción, alegría y júbilo lo que comúnmente no hace cualquier otra cosa en el universo.
Claro que quizás haya otras cosas, pero bajo esta condición de encierro y de stress no queda otra cosa que darle rienda suelta a la imaginación, lo que en definitiva hace que olvide este mundo por unos instantes en los que me sumerjo en la fantasía de escribir.
¿Qué escribo?
Experiencias personales, historias reales y una novela, aunque podría también añadir sueños, pero creo que eso no será necesario porque para ello tengo un lugar muy especial en la realidad escrita en un cuaderno.
Lo que si puedo decir es que cada cosa que escribo me impulsa a crear más historias, por eso no dudo en conocer diferentes tipos de personas y aunque esta pandemia no me permite un acercamiento real con la gente al menos cualquier cosa que me ocurra puede ser motivo para un escrito.
Si, un escritor es aquel que busca una historia y se añade como protagonista en él.
Con todo lo bonito que me está ocurriendo no dudo que mis historias se multiplicarán y espero seguir plasmando cada cosa que me ocurra por aquí o através de escritos reales en un cuaderno.
Un escritor jamás se cansa de escribir porque forma parte de sí mismo y no necesita nada más que las ganas de hacerlo y sin duda a mí las ganas no me faltan porque: ¡AMO ESCRIBIR!
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